masajes bebes
No hay nada que más nos guste en el mundo que achuchar a nuestro bebé, darle abrazos, besos, mimarlo… ¿verdad? Pues debemos saber que además de ser una acción muy beneficiosa para nosotras y para nuestro estado de ánimo y necesidad de sentir que él ya está aquí, que lo tenemos con nosotras y que ya todo está bien, es algo muy beneficioso también para él, para su salud y para su desarrollo psíquico. Gracias a los masajes nuestro bebé se puede relajar a la vez que comienza a entrar en contacto con el nuevo mundo al que acaba de llegar de una manera más natura y también segura.

Hablar de masaje infantil es hablar de un lenguaje no verbal que nos ayuda a conocer a nuestro pequeño y que él también comience a conocernos a nosotras. A nosotras nos encanta, sí, pero es que a él también debido a no solo se produce un contacto de la piel, sino que también hay un sinfín de sensaciones gracias al olfato, a la vista y al oído. Las formas de masajear a nuestro pequeño pueden ser muy variadas: desde comenzar por los muslos haciendo circulitos e ir bajando hacia los pies, los tobillos… todo de manera suave y delicada; hasta seguir por los bracitos pero teniendo un especial cuidado porque son extremidades más delicadas que las piernas. Estos movimientos circulares además son muy recomendables de hacer en el abdomen de nuestro bebé si éste padece cólicos, si además los completamos con calor generado con una toalla templada en el abdomen, pues mucho mejor.

¿El momento más indicado para hacer estos masajes? Pues normalmente es después del baño, pero no tiene por qué ser así en todos los niños. Si vemos que no les sienta bien o que se alteran un poco, siempre podremos esperar a otro momento. Eso sí, masajear diariamente a nuestro bebé es lo más recomendado.

Fuente|Faros.hsdbcn.org

Imagen| Bigstockphoto