posturas embarazadas

Uno de los sentimientos que más nos inundan cuando estamos embarazadas, sobre todo si nos enfrentamos a nuestro primer embarazo, es el miedo. Miedo a hacer determinados ejercicios, miedo a experimentar cambios en nuestro cuerpo, miedo al momento de dar a luz… uno de esos miedos  viene de la mano del dolor de espalda. Es normal que nos asustemos un poco al comprobar que nuestro cuerpo está experimentando cambios y que en ocasiones, como en el dolor de espalda, son muy molestos, pero debemos estar tranquilas porque es algo normal.

Suele ocurrir que cuando el útero está en crecimiento y además se están produciendo los cambios hormonales del embarazo las molestias en la espalda se incrementen. El útero en crecimiento estira debilitando los músculos y nos obliga a modificar nuestra postura  sometiendo a nuestra espalda a una presión mayor de la habitual.

Ante esto, es bueno intentar mantener la espalda erguida en la medida de lo posible, así como distribuir el peso del cuerpo entre las dos piernas cuando estamos paradas o de pie. Cuando estamos sentadas, es bueno apoyar la espalda al respaldo de la silla y que nuestros pies estén bien pegados al suelo, evitando el cruce de piernas.  En ocasiones es bueno buscar a una persona que te pueda dar masajes corporales para poder aliviar el estrés y las tensiones, así como buscar una buena postura para dormir. La más recomendable es acostarse de lado porque de esta manera se favorece la circulación. Sin dejar a un lado el descanso, un consejo al final del día,  cuando ya hemos acabado todas nuestras labores, es flexionar las piernas sobre nuestra barriga. Nos servirá para aliviar el dolor de espalda y también a reducir los calambres y favorecer nuestra circulación, sobre todo si estamos tumbadas en la cama, alzamos los pies  y hacemos movimientos circulares con ellos.

Por último, para concluir, aunque seguro que tu también tienes tus pequeños trucos para evitar estos dolores de espalda, hay algunas prendas premamá, sobre todo los pantalones  con banda elástica, que nos ayudarán a estar erguidas y no mal acostumbrar nuestra espalda.

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