baby dormir

Desde que nacen intentamos protegerles lo máximo posible, procurando no dejar nada a la improvisación, sobre todo cuando son bebés y necesitan más cuidados de lo normal. Uno de los hábitos que cambian por completo nuestra rutina diaria desde que llegamos a casa del hospital es el momento de dormir. Si ya somos padres experimentados sabemos que este momento cambiará de nuevo. Añadirá un sabor agridulce a nuestras vidas, ya que por una parte dormir al lado de nuestro hijo, oir su respiración y poder estar junto a él en los momentos que nos necesiten es un regalo, pero por otra parte añade un inconveniente importante, y es que la calidad de nuestro descanso disminuirá considerablemente, ya que, sobre todo al principio, necesitan comer a menudo y hay que despertarse para poder atenderle.

Pero, ¿hasta cuándo esta situación? ¿Cuánto tiempo es necesario que nuestro hijo duerma en la misma habitación que nosotros? Hay padres que no tardan mucho en cambiarles a su propia habitación, conozco mamás que a los tres meses o cuatro ya no duermen junto a sus bebés, y sin embargo otras que tardan mucho tiempo en hacerlo. Pero, ¿cuándo es el momento aconsejable para hacerlo? Realmente no hay una respuesta clara a esta pregunta. No existe un momento adecuado, ya que simplemente depende de la decisión que los padres tomemos a este respecto. Es cierto que si aún es muy pequeño las visitas a su habitación serán numerosas, ya que requiere nuestra atención. Pero, si ya es capaz de dormir cinco o seis horas seguidas, podríamos empezar a plantearnos el cambio de habitación.

Uno de los temores más extendidos en cuanto al sueño de los bebés es la llamada muerte súbita, una muerte inesperada que se produce mientras el niño duerme y que realmente preocupa a muchos padres, y es motivo para prolongar la estancia en nuestra habitación aferrándonos a la creencia de que si algo ocurriera nos daríamos cuenta enseguida al estar durmiendo a nuestro lado, cosa que no ocurriría si durmiera en otra habitación.

Lo cierto es que tanto los padres como los niños tienen que estar preparados para este momento, y entre todos intentar hacerlo de una manera lo más fácil posible para ambos, y sobre todo para nuestro hijo, que deberá afrontar una nueva etapa en su recién estrenada vida: dormir solito en su habitación.

Imagen| Bigstockphoto