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Puede que para much@s de vosotr@s estas serán las primeras vacaciones como papis. Seguro que estaréis deseando que llegue el momento de bañar a vuestro peque por primera vez en la piscina o en el mar, pero también estamos convencidos de que tendréis muchas dudas sobre lo que es conveniente hacer o no hacer cuando llegue esa inolvidable situación. 

¡Estamos aquí para ayudaros! por eso os hemos preparado una recopilación de los mejores consejos para disfrutar de grandes aventuras acuáticas con vuestros peques.

  • En España no existe una edad recomendada para el primer baño. Hay otros países, como Bélgica, que no lo aconsejan hasta que el peque tenga 1 año. Puedes bañar a tu peque cuando quieras, siempre y cuando las condiciones del agua sean adecuadas, sin residuos ni contaminantes de ningún tipo.
  • Si tu bebé tiene más de 6 meses debes aplicar crema protectora solar de alta protección y resistente al agua. Antes de aplicarla por todo el cuerpo, es recomendable hacer una prueba en la parte interior del antebrazo, para ver si la tolera correctamente. Si no hay rastro de alergias o irritaciones, ya puedes ponérsela por todo el cuerpo.
  • Para peques de menos de 6 meses se desaconseja el uso de cremas protectoras, ya que son muy vulnerables a la exposición al sol. Debes mantener al bebé a la sombra y utilizar barreras físicas que aíslen su delicada piel del sol, como camiseta, sombrilla y gorrita. ¡¡NUNCA exponer directamente a los rayo del sol!!.
  • Las mejores horas para disfrutar de las actividades acuáticas con tu peque son a primera hora del día o a última hora de la tarde, cuando los rayos del sol apenas inciden con fuerza. El único inconveniente es que en estos tramos horarios es cuando la temperatura puede ser más fresca y el agua estar más fría.
  • Ofrécele agua con frecuencia. Uno de los peligros de exponer al sol a bebés pequeños es la deshidratación. Si aún estás dando el pecho, ofréceselo con frecuencia aunque no lo pida, es su forma de saciar la sed.
  • Los baños deben de ser de menos de 10 minutos, ya que los bebés todavía no regulan bien su temperatura corporal. No olvides también tener en cuenta la temperatura del agua.  Si el agua está fría tu bebé estará más incómodo.
  • La piel de los bebés es muy sensible, y aunque el agua de mar es más beneficiosa para la piel que el agua clorada, el salitre que contiene puede producir picazón. Siempre que puedas aclárale con agua dulce después de (del) baño.
  • Comienza mojándole solo los pies. Primero con tus manos y luego, poquito a poco, vete mojando el resto del cuerpo, para que se vaya acostumbrando y no se asuste. Si le estás bañando en el mar ten cuidado con las olas. Vigila que no venga una más grande que pueda mojarle más de lo previsto y asustarle.
  • Usa pañales específicos para la piscina y el mar,  como los Swimmers de Chelino que están diseñados para que no se hinchen en el agua manteniendo la higiene del bebé. Además tienen barreras antiescapes que proporcionan a los peques la máxima protección y a los papis la tranquilidad de saber que no se va a producir escapes indeseados.
  • Juega con tu bebé en el agua. Es un momento muy especial para compartir y disfrutar con tu peque.
  • Si el peque empieza a llorar, sácalo del agua y vuelve a intentarlo más tarde. Recuerda que debe de ser una experiencia placentera. Si lo pasa mal no querrá repetir.
  • Ten preparada una toalla para secarle nada más salir del agua. Sécalo bien y ponle ropa seca para que no se le irrite la piel ni coja frío. 

 

Esperamos que estos consejos para disfrutar de grandes aventura acuáticas os ayuden a convertir el baño de los peques en una  piscina o playa  en una experiencia inolvidable y que la repitáis muchas veces.

Si has sido mamá recientemente, debes saber que por lo menos hasta que dura el puerperio, aproximadamente la 6º semana, los baños de inmersión no están aconsejados. Antes de bañarte en el mar o en una piscina consulta con tu médico.

¡Feliz verano y esperamos que disfrutéis de grandes aventura con vuestros peques!