Muchas son las mamis que, habiendo leído o escuchado estudios que aseguran que el bebé escucha cuando está dentro de la madre, se empeñan en ponerles música, leerles cuentos… hay otras que, sin embargo, creen que eso no tiene consecuencias reales en el feto y prefieren no realizar ese tipo de prácticas. Sin embargo, hace algún tiempo un estudio realizado por Minna Huotilaine, para el Centro Finlandés de Excelencia en la Investigación Musical Interdisciplinaria de la Universidad de Helsinki, reveló que efectivamente un bebé cuando nace no es un lienzo en blanco, sino que se ha visto influido por los sonidos que han llegado hasta él cuando estaba en el interior de la madre. Es por eso que él puede ser capaz de distinguir la voz de su madre o de otros familiares. Eso no es todo, porque el asunto cobra más fascinación si cabe, si tenemos en cuenta que en esos momentos el cerebro del feto se esté formando y desarrollando las conexiones que les permiten procesar las cosas a las que se expondrán cuando nazcan.
A estas conclusiones se llegó a través de diferentes pruebas empíricas en las que los investigadores expusieron a madres en su 29 semana de embarazo a una grabación en la que de manera repetida (cientos y cientos de veces) se escuchaba la palabra “tatata”. Cuando los niños nacieron se les sometió a escáneres en los que se evaluó la actividad de los cerebros de los bebés cuando escuchaban esa palabra. Aquellos que la habían escuchado siendo fetos, según los datos del estudio, “mostraron una mayor reacción a la palabra”.
Es por eso que Minna Huotilainen recomienda leer a los niños cuando están en el vientre de la madre. Si además de leerles, les ponemos música, los resultados y la estimulación del pequeño serán mucho mallores!
Fuente| Terra
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